Hace seis mil años, los antiguos egipcios consideraban el aloe vera como una planta milagrosa. La utilizaban de muchas maneras, desde el tratamiento de las quemaduras hasta la reducción de la fiebre. Unos milenios más tarde, se dice que la propia Cleopatra utilizaba el aloe en sus tratamientos diarios de la piel. Los antiguos científicos griegos también lo valoraban, y cuenta la leyenda que Alejandro Magno conquistó territorios frente a la costa de África para asegurarse el suministro de aloe vera para sus soldados.
Es decir, esta “planta milagrosa” fue tratada como un tesoro durante gran parte de la historia. Entonces, ¿por qué, aparte de utilizarla para los cortes y las quemaduras, hemos olvidado hoy algunos de sus numerosos beneficios?
Ya es hora de que el aloe vera recupere su trono, así que a continuación te presentamos los principales beneficios de esta planta increíblemente versátil:
Alivio para las quemaduras
Este es quizás su beneficio más reconocido en la actualidad. De hecho, un estudio de 2019 publicado en la Biblioteca Nacional de Medicina de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos descubrió que el aloe vera es una de las soluciones más eficaces para tratar las heridas por quemaduras de primer y segundo grado. Esto se debe a las importantes propiedades calmantes e hidratantes de la planta que ayudan a la piel a conservar su integridad.
Otro estudio demostró que el tiempo medio de curación de una herida por quemadura parcialmente gruesa con gel de aloe era de 12 días. Esto se comparó con la gasa de vaselina para tratar la misma herida, que tardó 18 días. Sin embargo, el mayor punto fuerte del aloe vera puede ser también su mayor obstáculo, ya que hoy se le conoce como la “planta de las quemaduras”, lo que ha eclipsado sus muchos otros maravillosos beneficios.
Aliada del antienvejecimiento
Para comprender los beneficios antienvejecimiento del aloe vera, hay que entender la anatomía de la planta. Cada hoja de esta planta verde y dentada está compuesta por tres capas:
- La capa interna es el icónico gel transparente. El gel de aloe contiene un 99% de agua y el resto está compuesto por glucomananos (un tipo de fibra dietética), aminoácidos, lípidos, esteroles y vitaminas.
- La capa intermedia está formada por látex y aparece como una savia amarilla conocida como aloína. Esta capa contiene glucósidos (un compuesto formado por un azúcar simple) y antraquinonas (compuestos orgánicos que causan un efecto laxante y ayudan a aliviar el dolor).
- La última capa, la más externa, se conoce como corteza. Esta gruesa piel protege a la planta y sintetiza carbohidratos y proteínas.
Desde el punto de vista estructural, el aloe vera tiene mucho que hacer en su interior: es como una fábrica de nutrientes. Se considera que hay al menos 160 ingredientes importantes en las hojas de aloe vera. Sin embargo, otros expertos estiman que tiene entre 300 y 400 componentes vitales. Estos componentes incluyen aminoácidos, enzimas, vitaminas y minerales, todos los cuales promueven un sistema inmunológico saludable, ayudan a la salud digestiva y reducen los nitratos dañinos.
Y con todos estos compuestos beneficiosos, la aplicación tópica del aloe también proporciona a la piel una serie de beneficios. Por ejemplo, el gel de aloe tópico puede aumentar la síntesis de colágeno en el cuerpo e incluso cambiar su composición. El colágeno es la proteína más abundante en el cuerpo – constituye un tercio de nuestro contenido proteico – y es uno de los principales bloques de construcción de nuestra piel, huesos, músculos, tendones y ligamentos.
Los niveles saludables de colágeno son también un componente clave para una piel sana y de aspecto joven. En resumen, debido a su efecto sobre el colágeno, el aloe puede ayudar a que su piel parezca menos arrugada. Además, el gel de aloe puede ayudar a eliminar las células muertas de la piel y el acné. Un estudio de 2014 descubrió que la combinación de una crema convencional para el acné con gel de aloe era significativamente más eficaz que la medicación para el acné sola.
Todo esto no te debería sorprender demasiado. Si la “planta de las quemaduras” puede curar lesiones de primer y segundo grado, ¿por qué no iba a funcionar también con la piel envejecida o dañada por el sol?
Beneficios nutricionales y antiinflamatorios del aloe vera
Al igual que otras plantas de hoja verde, el aloe vera está cargado de una buena cantidad de vitaminas, minerales y aminoácidos.
Veamos algunos de los ingredientes importantes que contiene el gel de aloe:
- Vitaminas: El aloe vera contiene vitamina A, que ayuda al sistema inmunitario y a la reproducción; B12, que mantiene sanas las células sanguíneas y ayuda a crear nuevo ADN. También contiene vitaminas C y E; la primera es fundamental para un sistema inmunitario sano y la segunda previene la inflamación y favorece la salud de la piel.
- Aminoácidos (los bloques de construcción de las proteínas): Hay 20 aminoácidos que nuestro cuerpo necesita para los procesos vitales. De esos 20, hay 9 que nuestro cuerpo no puede producir por sí mismo. En otras palabras, tenemos que encontrar estos aminoácidos en nuestros alimentos, por lo que se denominan aminoácidos esenciales. El gel de aloe proporciona 7 de los 9 aminoácidos esenciales.
- Enzimas digestivas: Las enzimas digestivas son fundamentales para descomponer los macronutrientes como las grasas, las proteínas y los carbohidratos en trozos aún más pequeños para ser absorbidos. El consumo de alimentos ricos en enzimas digestivas ayuda a la digestión y conduce a una mejor salud intestinal. Algunos alimentos con alto contenido en enzimas digestivas son los kiwis, el jengibre, los aguacates, los plátanos… y SÍ, el gel de aloe, que contiene 8 enzimas digestivas. Estas enzimas incluyen la aliasa, la fosfatasa alcalina, la amilasa, la bradiquinasa, la carboxipeptidasa, la catalasa, la celulasa, la lipasa y la peroxidasa. Algunas de ellas ayudan a reducir la inflamación y otras a descomponer el azúcar y las grasas.
- Minerales: El gel de aloe aporta calcio, cromo, cobre, selenio, magnesio, manganeso, potasio, sodio y zinc. Los minerales particulares en los que el gel de aloe es más alto promueven la salud de los huesos, regulan la presión sanguínea y ayudan a las funciones metabólicas.
- Antraquinonas: Las antraquinonas son compuestos que pueden ayudar a proteger contra las enfermedades renales, hepáticas y el cáncer. Un estudio descubrió que las antraquinonas suprimen la inflamación y favorecen un intestino sano. El aloe proporciona 12 antraquinonas únicas.
Además de los micronutrientes mencionados y sus beneficios, el consumo de gel de aloe puede ayudar a aliviar el ardor de estómago. Más concretamente, puede ayudar con la enfermedad de reflujo gastroesofágico (ERGE), un trastorno digestivo que a menudo provoca acidez.
Una advertencia importante al consumir aloe vera es que hay que empezar con una pequeña cantidad, ya que algunas personas pueden experimentar un efecto laxante (probablemente debido a las antraquinonas).
Claves para utilizar el aloe vera fresco
Tanto las plantas como las hojas de aloe vera son bastante fáciles de encontrar en las plazas y mercados hoy.
Si piensas utilizar el aloe para la piel, puedes extraer el gel con los dedos (o con un objeto afilado) y aplicarlo directamente sobre la piel. También puedes exprimir el gel una vez que hayas recortado los bordes espinosos de la hoja
Dependiendo del tamaño de tu planta de aloe, 3-4 hojas deberían dejarte entre ½ y ¾ de taza de gel de aloe vera. Corta el gel de aloe en rodajas o cubos y refrigéralos cuanto antes
Finalmente, en cuanto al consumo de aloe vera, hay muchas recetas en línea, una de nuestras favoritas es simplemente agua de aloe y limón, ¡para obtener una bebida saludable y deliciosa!
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¡Recuerda tus decisiones diarias son tu mejor medicina!
*Nota del editor: La información en este artículo está destinada a su uso educativo solamente y no es un sustituto del consejo médico profesional, el diagnóstico o el tratamiento. Siempre busca el consejo de tu médico y otros proveedores de salud calificados antes de empezar cualquier dieta, suplemento, acondicionamiento físico y otros programas de salud.
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